Xavi y Laporta dijeron que el
equipo estaba en buena racha y aún había Liga.
A pesar de que la buena racha se produjo ante Osasuna, Alavés, Granada,
Celta y Getafe; ganando alguno de los partidos de manera penosa para acabar con
13 de 15 puntos posibles, se podía comprar, con mucho escepticismo por mí
parte, el discurso y concederles el beneficio de la duda antes de una salida de
las que diríamos difíciles, el campo del quinto clasificado de la Liga.
El resultado fue decepcionante.
Mas que por no haber podido ganar, porque tampoco parece que se pusiera mucho
empeño en la victoria y hasta dio la sensación de que se conformaban con el empate.
Y es que el punto se podría considerar como bueno si se trata de consolidar una
plaza en Champions, pues mantienes la ventaja con el Athletic y le ganas el gol
average. Pero, si se trataba de apurar las opciones de ganar la Liga después
del empate del Real Madrid en Mestalla, es incomprensible tan poca ambición,
tanto dentro del terreno de juego como en la banda.
El Athletic demostró la misma
falta de ambición respecto a ganar un puesto en Champions y da la impresión de que,
con el gran objetivo de ganar la Copa tras cuarenta años, ya están cómodos en
una quinta plaza y ven muy improbable quedar entre los cuatro primeros. Valverde
cambió a varios jugadores respecto al partido de Copa, jugando con gente poco
habitual y muy jóvenes. Sus declaraciones en rueda de prensa posterior al
partido confirman esta impresión, calificó el punto obtenido de puntazo.
Lo único salvable del Barça fue
el primer cuarto de hora en que pareció salir con más ambición e ideas claras.
Pero fue un espejismo que duró poco y el partido se equilibró, el Athletic empezó
a comerle terreno al centro del campo azulgrana, que ya había perdido por lesión
a De Jong, y movía bien la pelota, intentando entrar por las bandas, pero con
una evidente falta de calidad técnica en algunos de sus jugadores. El Barça solo
creó peligro en una irrupción del animoso Fermín, que tapó el portero, y el
posterior rechace que recogió Cancelo chutando de manera precisa desde unos cuarenta
metros y obligando a, entre Unai Simón y un defensa, sacar la pelota
prácticamente debajo de la línea de gol. Antes de que acabara la primera parte,
enésima lesión de Pedri, que ya no deja dudas en cuanto a que sus reiterados
problemas musculares son muy preocupantes.
La segunda parte fue tan mala
que ninguno de los dos equipos llegó a chutar con peligro entre los tres palos.
Y eso que el partido fue intenso, pero es que los jugadores no daban para más
ni en uno ni en otro equipo. En el caso del Athletic, por falta de capacidad de
los suplentes que casi conformaron el once inicial y, en el caso del Barça, porque
llevan meses sin ningún plan de juego y solo cabía la esperanza de que, en un
arranque de calidad individual de algún jugador como Lamal, se produjera una jugada de peligro que acabara en gol.
Prácticamente inéditos los
porteros, Xavi contribuyó con sus cambios a elevar el nivel de bochorno del
equipo. Sin que constara ningún problema físico, realizó un incomprensible
cambio sacando del equipo a un Cubarsí, cada día más asentado, para poner a Iñigo.
Y remató la faena haciendo entrar al terreno de juego al inoperante Joao Félix, manteniendo en el campo al
no menos inoperante Lewandovski (que frenó su racha goleadora a la que se encontró
con una defensa con un poco más de nivel que en los cinco partidos precedentes)
y un cambio hombre por hombre al entrar Romeu por Cristiansen, jugador éste último
que también dejo ver las costuras como pivote defensivo cuando el rival tiene
un poco de nivel ya que era incapaz de sacar jugada la pelota. Aunque parecía
que era la última oportunidad de engancharse a la Liga, Xavi se siguió comportando
como un cobarde, manteniendo la jerarquía de tener en el campo al desacertado
Lewandovski antes que poner a Guiu, que le salvó el culo en el partido de ida
en Montjuich cuando el partido parecía acabaría en empate a 0; o dar entrada a
Tigrinho que, ya que va a costar 60 millones, se supone que ha venido a jugar
minutos importantes.
Veremos qué pasa en los próximos
compromisos, pero la marcha del equipo, al igual que las lesiones de De Jong y
Pedri, no pinta nada bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.