EVERYBODY NEEDS SOMEBODY
"Tierras lejanas" es un western de Anthony Mann, con guion de Borden Chase, rodado en 1954 y que, en Italia, vemos que tuvo el mismo título solo que cambiando el número.
La película trata de uno de los temas claves en la historia del western: un grupo de personas, aquí mineros, que quieren fundar un asentamiento estable, una ciudad. Y se mencionan las dos construcciones clave para ellos, por un lado una escuela y, por otra, una iglesia. Pero ya sabemos que el asentamiento de la civilización, de un lugar con ley y orden, nunca sale gratis. Gannon es un personaje, interpretado de manera excelente por John McIntire, que actúa como único poder en la zona y se dedica a ejercerlo de manera arbitraria e intimidatoria rodeado de un grupo de matones y de una atractiva mujer de negocios turbios llamada Ronda Castle, y que está interpretada por Ruth Roman.
La comunidad de mineros necesita de un hombre diestro con las armas que sea capaz de enfrentarse a Gannon e imponer la ley posibilitando la viabilidad de ese asentamiento urbano. El único hombre capaz de hacer eso es Jeff Webster, interpretado por el siempre elogiado James Stewart, un hombre misterioso que transita por la zona con un socio ya de avanzada edad, papel a medida del enorme Walter Brennan.
Webster es un individualista nato, dice que prácticamente no dice nunca la palabra gracias y siempre busca en primer lugar sus objetivos que pasan por ganar dinero y marchar con su socio a Utah para retirarse en un rancho.
Frustrado su intento de abandonar el territorio, y víctima de una emboscada en la que es asesinado su socio, quedará malherido y sólo podrá sobrevivir y seguir adelante gracias a la ayuda que le presta la comunidad, en especial un personaje llamado Renne Valon que es una chica joven y enamorada de un Webster que no la corresponde.
Tomando conciencia que no puede inhibirse de la situación insostenible de los mineros frente al autoritarismo déspota de Gannon, se producirá el enfrentamiento con Webster con el previsible triunfo del último que, a su vez, espolea al resto de la comunidad a expulsar a los secuaces de Gannon del territorio.
No obstante, el final parece ambiguo. A pesar que el último plano es uno de Webster y Valon, no sabemos si un hombre que se ha mostrado radicalmente individualista y desinteresado respecto a la vida comunitaria podrá establecerse como un vecino más. Y tampoco parece que el final suponga una unión marital entre los personajes ya que, en ningún momento de la película, Webster expresa ninguna atracción respecto a la chica.
Stewart está espléndido en esa interpretación de héroes complejos propia de los otros westerns rodados con Mann. Acaba siendo un héroe a su pesar, pero héroe al fin y al cabo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.