miércoles, 13 de marzo de 2024

BARÇA 3- NÁPOLES 1

 




El Barça venció y convenció accediendo, después de cuatro temporadas, a los cuartos de final de la Champions. Empezó con energía, presionando arriba y con mucha intensidad. Fermín, un jugador joven que aún tiene mucho que aprender pero que también tiene muchas virtudes a explotar, mostró su vocación ofensiva pisando área y rematando a la red una buena jugada de Rafinha por la banda izquierda, mucho más activo que cuando esa posición de ataque la ocupa Joao Félix, ayer suplente. A los tres minutos, Lamal, en una jugada de, como dijo Aguirre con cariño, rata, se llevó una pelota haciendo un sombrero y el muy sinvergüenza condujo unos treinta metros para, en un gran pase, habilitar a Rafinha delante del portero napolitano. El balón fue escupido por la madera, pero Cancelo, atento a la jugada, marcó el 2-0 cuando aún no habían transcurrido veinte minutos de partido.

 El Barça bajó un poco el ritmo, imposible de mantener, y el Nápoles entró en el partido pues hasta ese momento había sido barrido por el Barça. Sobre la media hora de juego, una buena combinación en ataque propició el 2-1 y la cosa se podía haber complicado pues Ter Stegen realizó una gran parada a un cabezazo de un delantero italiano mandando el balón a córner.

El balance al llegar al descanso fue positivo. El Barça había sido superior, jugado aceptablemente bien, con ganas e intensidad, aunque el Nápoles estaba tocado, pero no noqueado y se mantenía vivo en la eliminatoria.

En la segunda parte, los primeros minutos fueron del Nápoles y temíamos que se viera algo parecido al partido de ida, en el que el Barça dilapidó la ventaja y permitió el empate. Pero ayer Xavi acertó con los cambios, sobre todo con la entrada de Sergi Roberto por un ya cansado Fermín. Roberto dio consistencia al medio campo y el Nápoles empezó a ceder terreno, Gündogan adelantó la posición y se crearon ocasiones, haciendo intervenir en varias ocasiones al portero napolitano. No obstante, y pese a merecerlo, el tercer gol no llegaba y hubo un momento muy peligroso cuando el Nápoles pudo marcar el 2-2 en un remate de cabeza desde la frontal del área pequeña. Hubiera sido injusto porque el Barça tenía más ocasiones, pero cuando estás a un gol de empatar estás vivo en la eliminatoria.

Pero, a falta de unos diez minutos, llegó el tercer gol en una espléndida jugada. Gündogan filtra hacia el interior del área un balón a Roberto y éste, delante delportero, se saca una asistencia a lo Laudrup para Lewandovski que marca a placer. Con el tercer gol, quedó finiquitado el partido aunque Romeu, bastante desacertado, tuvo una pérdida que pudo ser el 3-2.

Ayer el equipo estuvo muy bien. Los jóvenes empujaron, Cubarsí se doctoró en Europa y muy buenas aportaciones de Lamal y Fermín. Los demás no desentonaron, mostraron ganas y sudaron la camiseta ofreciendo un digno nivel.  A esperar un sorteo benévolo y a soñar, que es gratis.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

MÁS RÁPIDO QUE EL VIENTO

  Más rápido que el viento (1958) es un western que tiene muchos puntos atractivos. Dirigido por un competente Robert Parrish, vi que en el...